LA HISTORIA DEL DESHIELO DEL MAYOR GLACIAR DE ITALIA
A lo largo del año, el glaciar de Lares experimenta una transformación visible, tanto en su aspecto como en su sonido, que revela una evolución preocupante. La tercera formación más grande del grupo Adamello, el mayor glaciar de Italia, a 2500 metros de altitud, retrocede a un ritmo impresionante, creando una escena casi preapocalíptica. Una experiencia sensorial contradictoria en la que se alternan la belleza y la angustia, la grandeza y la desolación, y que se ve intensificada por las oscilaciones térmicas registradas en el 2023, que han provocado que el glaciar de Lares se retire aún más de la zona de acumulación.
Hoy, el glaciar está sucio por los escombros y los gases de efecto invernadero que se depositan en su superficie. No se desprenden icebergs y sobrevive únicamente de las nevadas del invierno y de la primavera. El sufrimiento del glaciar de Lares también se percibe a través de los lamentos y estruendos de las dolinas que se desmoronan al deslizarse, emitiendo notas terribles y ensordecedoras, casi como si pidieran auxilio al caer.
Paolo explora por primera vez el mundo al aire libre en el glaciar Adamello cuando es niño. La profesión de fotógrafo le aleja entonces del entorno que le hace enamorarse de las montañas. Cuando regresa a lo que él llama su segundo hogar, se siente conmovido al ver el glaciar. No podía imaginar que se encontrara ante la misma formación, y no podía creer que el cambio hubiera alcanzado niveles tan extremos.
Es durante una salida con las pieles cuando Paolo se da cuenta de la urgente necesidad de contar el retroceso del glaciar de Lares a través de una experiencia sensorial cruda y directa.
Junto con otros fotógrafos y realizadores audiovisuales, idea «El Canto del Hielo», un proyecto de denuncia a través de un documental que narra el deshielo del glaciar de Lares mediante time-lapses. Divulgativo, con encuentros públicos y exposiciones fotográficas, y sensorial, a través de una instalación itinerante que permite al visitante sumergirse en la experiencia del deshielo del glaciar.
El proyecto tiene inicio en el verano de 2024, con la recopilación de imágenes (una cada 2 minutos) y el muestreo de sonidos que caracterizan el entorno natural del glaciar.
A través del programa «Help the Mountains – 1% for the outdoor community», hemos decidido apoyar el proyecto «El Canto del Hielo», para sensibilizar sobre este tema y mantener vivo el recuerdo de un glaciar que dentro de unas décadas ya no se podrá explorar.