FLY, LAUTERBRUNNENTAL

Swissway to Heaven by Cédric Lachat, Cuarta etapa

Después de WöGu (en el Rätikon), esta es la segunda vía más difícil de Suiza. «Es por esto que he decidido incluirla en mi proyecto Swissway to Heaven», explica Cédric Lachat. Estamos hablando de Fly, una magnífica vía que llega hasta la cima Staldeflue en el valle de Lauterbrunnen: «No es una pared legendaria o conocida, pero esta pared de 500 metros es tan imponente y difícil que he decidido hacerle frente de todos modos». La vía consta de 19 largos con una dificultad que va in crescendo y que culmina con los últimos cuatro largos de 8b, 7b+, 8c y 8b+.

Una vía abierta desde abajo entre los años 2006 y 2009 por Roger Schäli, Michel Pitelka, Markus Iff, Bernd Rathmayr, Mäx Grossman y Stephan Eder. Liberada en 2014 por Alexander Megos que ha tardado cuatro días en completarla. Mientras Cédric está escalando, junto aTobias Suter, tiene que luchar contra las condiciones. El cielo está perfectamente despejado, pero, hacía el mediodía, el sol da de lleno en la pared. «Necesitas las condiciones adecuadas para gestionar bien la adherencia en estos largos. Cuando el sol pega fuerte es imposible escalar». Y es por culpa del sol que Cédric Lachat cae cuando ya ha completado la mayor parte de la vía. «No veía nada, estaba cegado por el sol. Así que hemos decidido esperar cuatro horas y luego, con la sombra, intentarlo de nuevo». ¿El resultado? La primera repetición y la primera escalada en libre en el día de Fly, una de las vías largas más difíciles del mundo.